«Indígnese», la acción política de Stéphane Hessell
Con más de 700.000 copias vendidas en dos meses, el panfleto «Indignez-vous» (Indígnese), de Stéphane Hessel, filósofo de 93 años de edad y antiguo miembro de la Resistencia francesa, llama al compromiso social y político, a partir del sentimiento de acción que surge de la injusticia reinante.
El éxito del panfleto, que tiene un precio de 3 euros, responde a cierta nostalgia popular por los tiempos pasados, y su popularidad se ha cimentado por el boca en boca.
Leer este panfleto supone un acto político y de compromiso. «Indígnese» la emprende contra el estrellado movimiento de globalización, frente al cual se deja oír el clamor colectivo de que la riqueza de unos no debe implicar, necesariamente, la pobreza de muchos otros. Aún convocando un extenso público de izquierda, el panfleto de Hessel surge a partir del espíritu socialdemócrata.
A pesar de su llamado a la ira frente a la destrucción del sueño de libertad e igualdad, Indignez-vous! es moderado, aún en su paralelo con la resistencia francesa: «Hoy en día las razones para la indignación pueden parecer menos claras en un mundo demasiado complejo. ¿Quién está al mando? ¿Quién decide? Distinguir entre las diferentes corrientes que influyen en nuestro gobierno no siempre es fácil. Ya no estamos tratando con una pequeña elite, cuyas acciones se pueda comprender fácilmente. Podemos ver claramente que el nuestro es un mundo vasto e interdependientes.»
Para Hessel, la indignación es la fuerza que lleva a los actores pasivos a comprometerse y obrar, sin embargo, la acción a partir de este sentimiento, anula otros motivos válidos para actuar, como la conciencia emergente, la decisión racional, el deseo de servir, y la búsqueda de la verdad y justicia.
Nacido en 1917 en Berlín, en el seno de una familia judía, llegó a Francia en 1925, se convirtió en ciudadano francés en 1937, ingresando en la École Normale Supérieure en 1939.
Movilizado en la Segunda Guerra Mundial, fue capturado y posteriormente escapó para unirse al General De Gaulle en Londres. Enviado a Francia en 1944, fue detenido y deportado a Buchenwald, donde ocultó su identidad para evitar la ejecución. Escapó por segunda vez, siendo recapturado, y finalmente saltó de un tren para reunirse con las líneas americanas en 1945.
Después de la Liberación, fue nombrado secretario de la Comisión de Derechos Humanos y participó de la redacción de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Le fue concedido el título honorífico de Embajador de Francia por la izquierda en 1981, dedicando su retiro al activismo en favor de los inmigrantes indocumentados y, más recientemente, en nombre de los palestinos, especialmente a través de su participación en la campaña para boicotear los productos israelíes.
Fue condecorado con la Legión de Honor en 2006.