El verano sin hombres, de Siri Hustvedt
Por lo general, aunque bien es verdad que las cosas van cambiando poco a poco, aún los logros del hombre siguen estando muy por delante de los de la mujer. Esto quiere decir que, en términos literarios que son los que vienen al caso y dicho en “roman paladino”, si tú eres escritora y tu marido es un autor de éxito, lo vas a tener ciertamente complicado para que tus novelas sean tenidas en cuenta en la estima que, presumiblemente, se merezcan. Vamos, que posiblemente tengas que trabajar el triple y tener el doble de suerte de lo que sería lo normal hasta conseguir que tu nombre adquiera personalidad propia con respecto al de tu marido.
En el caso que hoy nos ocupa, Siri Hustvedt (nota para despistados/as, no porque a estas alturas necesite la aclaración: es la esposa del célebre Paul Auster) ha conseguido traspasar todas esas fronteras y con la inminente publicación de su nueva novela, “El verano sin nombres”, que está prevista para comienzos de este próximo mes de noviembre tiene todas las papeletas para afianzarse aún más en el mercado.
Con una brillante sencillez, Mrs Hustvedt muestra en su nueva obra todo su talento y lo pone al servicio del intelecto y de la vitalidad de la historia. En este sentido veamos, cuando Boris Izcovich pronunció la palabra “pausa” su mujer, Mia Fredricksen, no entendió nada y se volvió loca. Porque, la verdad, ¿cómo entender algo así cuando en 30 años de matrimonio no ha habido ni una sola infidelidad por ninguna de las partes? Si, además, tienen una hija encantadora y, por si fuera poco, su relación de pareja fue creciendo y madurando hasta alcanzar, casi, la telepatía. Pues bien, todo esto se entiende si añadimos que la famosa “pausa” es francesa, joven, con una buena delantera y compañera de trabajo en el laboratorio de Mr. Izcovich.
Afortunadamente, la locura de Mía fue tan sólo transitoria (de una semana y media, para ser concretos) y, con este bagaje, no duda en volver a Bonden, si ciudad natal, donde se encontrará con su madre (que vive en una residencia “para ancianas activas e independientes”. Será un verano distinto, rabioso, reflexivo. Que promete.
Título: “El verano sin hombres”
Autora: Siri Hustvedt
Editorial: Anagrama
Foto Vía: J Naraim Blogspot