Carl Sagan, el gran divulgador de la Ciencia

La figura del divulgador científico es imprescindible en nuestros días, en los que la ciencia avanza a pasos agigantados. Siempre es de agradecer que figuras de la talla de Stephen Hawking, Isaac Asimov, Richard Dawkins, Desmond Morris, Eduard Punset y otros muchos hayan acercado al lenguaje cotidiano las leyes y misterios del funcionamiento del universo. Pero hay entre ellos uno que destaca por su manera de comunicar, hablando siempre desde el sentido común y de la intrínseca relación que tenemos con el cosmos, el investigador, astrónomo y gran comunicador Carl Sagan.

Nacido en 1934 en la ciudad de Nueva York, se graduó como astrónomo en la Universidad de Chicago y después ejerció como profesor en las universidades de Berkeley y Harvard. En 1970 pasó a dirigir el Centro de Estudios Planetarios y a colaborar de manera continua con la NASA durante las misiones Viking, Pioneer y Voyager, además de escribir varios libros de ciencia-ficción y obtener el Premio Pulitzer en 1978 por su obra Los Dragones del Edén (un ensayo sobre posibles caminos de la evolución humana).

Siempre contrario al desarrollo de armas nucleares, optimista y realista en sus esperanzas de hallar vida extraterrestre, ha colaborado en diversos proyectos como el SETI y la búsqueda de vida microscópica en otros planetas del sistema solar. El reconocimiento por parte del gran público vino con su serie documental «Cosmos«, emitida durante los años 80, un repaso a la historia del universo y de la humanidad.

Sus puntos de vista sobre el escepticismo, el uso apropiado de la tecnología y su manera sencilla y cercana de explicar conceptos complejos sobre astronomía y física, se juntan con un exhaustivo conocimiento de la historia y la naturaleza humanas.

En uno de sus ensayos, titulado «El mundo y sus demonios«, va más allá de la mera divulgación y pone en nuestras manos el «kit del escéptico», una serie de normas para desmontar dogmas e ideas preconcebidas, muy útil en estos tiempos de sobresaturación informativa en la que cada vez es más difícil separar la realidad de la conveniencia. Carl Sagan se ha ganado con honores un puesto entre los más grandes comunicadores del siglo XX.

Bibliografía: